Despúes de eso y de los sermones de I* y de B* me dí cuenta de que había llegado el momento de intentar dejar esta mierda por enésima vez. Pero es tan complicado.
Me noto mas delgado, pero aún no me siento bien con mi cuerpo. Hoy tenía verdaderamente mucha hambre, y no fuí capaz de limitar mi ración. En realidad ha sido un almuerzo propio de una persona normal, pero mi cuerpo me pide vomitar. Creo que lo paso peor cuando no quiero descomer que cuando tengo etapas de trastorno.
Después de tódo esto, y tras darme cuenta de que la única forma de sentirme bien es con él estomago vacio, he decidido ocultar el problema a mis padres, pero no a mis I* y a B* porque merecen saber la verdad, y no puedo mentirles. Y así todo arreglado. Y tengo miedo de ser así siempre, de que esto pueda ir todavía a peor y de morir de una anemia de caballo, pero ahora mismo no encuentro posible solución, así que seguiré en mis trece, y ahora mismo no quiero hablar de eso, me pone mal.
Hoy también pensé mucho en que es importante y que no lo es a nivel de relaciones. Y me di cuenta de que mi cabeza está mas centrada en el asunto de mis embrollos amorosos que en mis amigos. Voy a dejar lo primero en un segundo plano para centrarme mas en lo segundo. Tengo muchísima suerte de tener su compañía, y si quiero que dure tengo que invertir en ellas.
Os quiero, I* y B*
En fin, hoy es un dia de bajón, pero no me preocupo, espero estar bien mañana. Hoy por la tarde me comeré un pomelo y beberé agua con limón a salud de los blogeros trastornados. Nos vemos. Cuidaroooos....
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